lunes, 7 de marzo de 2011

Palo flamenco

CARACOLES.

El nombre de este palo se debe a la letra del estribillo que repite insistentemente la palabra caracoles. Pertenece al mismo grupo que las cantiñas, el compás es el mismo. Aunque su origen es andaluz, se ha llegado a pensar que era de Madrid debido a que las letras de los caracoles más conocidos hacían numerosas referencias a la capital de España. El baile, vinculado a las alegrías y a la soleá, podría tener relación con los caracoles clásicos del grupo de bailes de palillos. Se interpretaban en los cafés cantantes y son más adecuados para la mujer.

BAILE
Baile flamenco más propio de la mujer, por lo que presenta, como las soleares o las peteneras, un gran número de movimientos ondulatorios que se corresponde con los punteados leves y con la melodía cadenciosa de la música. Es posible que tenga su precedente en otro baile de la llamada escuela moderna de palillos y que se conocía por el nombre de caracoles clásicos.
El compás es el mismo que el de todas las cantiñas, de doce tiempos:
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12

GUITARRA
El toque se realiza únicamente en DO mayor y dominante y para buscar la tonalidad del que canta. Es necesario el uso de cejilla ya que sólo se usa esa colocación de mano izquierda. Casi al final la melodía puede hacer una modulación que va a MI mayor y FA mayor, pero inmediatamente vuelve a DO mayor y dominante, que son los acordes básicos. La medida es la misma que la de las soleares, las alegrías y las bulerías. Tanto el rasgueo como las falsetas o variaciones tienen que ser grupos de cuatro compases.  

CANTE
Sus letras suelen ser graciosas y, a veces, picantes, y en ellas se introduce, entre estrofas y a modo de estribillo, la palabra caracoles. Su origen se remonta al siglo XIX y la tradición atribuye a Tío José El Granaíno la creación de este cante. Pero quién verdaderamente los engrandeció y les dio fama fue Antonio Chacón que les añadió detalles musicales y transformó algunas letras con alusiones a Madrid en las coplas. Esto ha llevado a pensar que los caracoles eran un cante madrileño. Actualmente algunos cantaores llevan este estilo en su repertorio, entre ellos, Naranjito de Triana y Chano Lobato.
Como palo, pertenece al grupo denominado de las cantiñas y musicalmente está muy próximo a las alegrías y al mirabrás. Es un cante cuya copla consiste en una serie de estrofas, con versos de diferentes medidas.
¡Como reluce
la calle de Alcalá,
como reluce
cuando pasan por ella
los andaluces!
Antes de que te olvide,
Manuela Reyes,
se secará la fuente
de la Cibeles.
¡Caracoles! ¡Caracoles!
Mocita, escucheme usté
Son tus ojitos dos soles,
¡Vaya bonita y olé!
 



 


No hay comentarios: